Este templo del siglo XVIII perteneció a la orden dominica. Fue creado en honor a san Sebastián Mártir, y, por sus dimensiones, es considerado como el templo más pequeño entre los barrios del centro de Tepetlaoxtoc. Sin embargo, la cantidad de mayordomías y los casi 15 días que dura su fiesta superan por mucho los festejos dedicados a cualquier otro santo patrón en el municipio. Esta gran celebración patronal se lleva a cabo en la segunda quincena de enero, y se divide entre 12 gremios.
De acuerdo con la leyenda popular, en 1965 llegó a Tepetlaoxtoc una recua que transportaba objetos a Ciudad de México. Fatigados por el viaje, los arrieros se dispusieron a descansar. Cuando se sintieron listos, prepararon su carga y se dispusieron a marcharse. Sin embargo la mula, que transportaba una gran caja, se echó. El arriero, al ver que sus esfuerzos por levantar al animal eran inútiles, encargó la caja y se fue, prometiendo volver por ella. Pasaron muchos años y aquel hombre jamás regresó. Entonces, las autoridades del lugar decidieron abrir la caja, y en su interior encontraron una estatua de san Sebastián Mártir.